Ahora que llega el calor y coincidiendo con nuestra nueva campaña de Conservas, Aceitunas y Salazones, os vamos a hablar del origen de las conservas y algunas curiosidades muy interesantes.
Las conservas son el aliado perfecto para preparar un buen aperitivo o incluso para cocinar menos.
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¿Qué propiedades tienen las conservas?
Las conservas son muy prácticas y una de sus grandes ventajas es que en muchos alimentos no pierden ninguna de sus propiedades.
Son fuente de proteínas, minerales y vitaminas, y siguen manteniendo las mismas propiedades que si tomaras los alimentos en fresco, pero con la comodidad en almacenaje y conservación que ofrecen.
Napoleón Bonaparte: precursor de las conservas
En el siglo XVII, la conservación de alimentos se había convertido en una necesidad para los ejércitos y marinos que embarcaban en largos viajes.
Fue Napoleón quien quiso buscar una solución a los procedimientos de conservación tradicionales que tenían limitaciones de tiempo y eran perjudiciales para la salud.
Nicolas Appert nuevo sistema de conservación
En 1810, Nicolas Appert, un confitero francés, ideó un sistema de conservación de alimentos en vacío mediante un tarro de cristal cerrado herméticamente y hervido durante un periodo de tiempo.
Como descubriría Pasteur años después, este procedimiento mataba los microorganismos y conservaba la comida con todo su sabor. El Gobierno de Napoleón le premió con 12.000 francos para industrializar su método.
Phillippe de Girard segunda innovación en las conservas
Otro francés, Philippe de Girard en 1820 aportó la segunda innovación decisiva. Usó un nuevo recipiente de hojalata compuesto de láminas de hierro bañadas en estaño, en lugar de tarros de cristal.
Se las arreglaron para que la alta sociedad inglesa, incluso la Reina, probaran los alimentos en las novedosas latas de hojalata, y pronto se convirtió en el suministrador oficial de la marina británica.
William Lyman y el abrelatas de rueda cortante
Estas primeras latas se abrían mediante un cincel y un martillo, por lo que era necesario crear un método más sencillo y rápido para poder disfrutar de las conservas.
Fue el americano, William Lyman, quien en 1870 inventó el abrelatas de rueda cortante, dando así el tercer paso decisivo en el desarrollo de las conservas.
A partir de aquí las latas de conserva se empezaron a consumir en todo el mundo de forma generalizada.
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